Al punto de implementar un toque de queda para los menores de edad se han visto obligados los habitantes de la comuna Villavicencio. La presencia excesiva de indigentes, recicladores y la respectiva acumulación de desechos, los puntos de microtráfico (ollas) y chatarrerías no solo ponen en peligro la integridad de sus niños y adolescentes, sino que además afectan el bienestar y el entorno de la comuna.
Esta es una de las principales preocupaciones de los habitantes de uno de los sectores más antiguos de Pereira, según se lo manifestaron a Juan Pablo Gallo, candidato a la Alcaldía de Pereira.
La actual panorámica de la localidad es atribuida al desplazamiento que hizo el Plan de Renovación Urbana sin contemplar el traslado de estos factores sociales. Símbolo de esta problemática es el parque ubicado en la Avenida Ferrocarril, calles 10 y 11 y el puente peatonal.
Los habitantes denuncian además el matoneo en las instituciones educativas, reconocen la irresponsabilidad de los padres, la descomposición social y reclaman la construcción de un jardín infantil pues los niños no son aceptados en el más cercano ubicado en el barrio Alfonso López.
Otra dificultad para los habitantes es la lejanía del puesto de salud, la mala atención y el escaso personal médico.
Por su parte, los líderes manifestaron que la Administración Municipal no ha atendido el Plan de Desarrollo de la Comuna construido en 2012.
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