OPINIÓN / 'Vamos bien'


En estos días volvió a nuestra memoria un hecho, aparentemente baladí pero a la postre significativo para nuestra vida, con características de anécdota. Ocurrió en 1969 en San Antonio de Getuchá, a orillas del río Orteguaza, en el Departamento del Caquetá, cuando tuvimos la misión, con tres funcionarios públicos enviados desde Bogotá, de hacer una inspección a un vasto sector selvático localizado aproximadamente 20 kilómetros hacia el oriente del entonces incipiente caserío, con el fin de establecer la conveniencia de desarrollar un programa de colonización dirigida. 

Para el logro de esta misión contratamos con el Capitán de la etnia (así denominaban a quienes comúnmente llamamos caciques) a dos indígenas Coreguajes. Despuntando el alba, iniciamos nuestra incursión que estimamos duraría cinco días: uno ingresando hasta llegar al objetivo, tres inspeccionando el terreno y tomando muestras de suelos y del follaje predominante, y uno más regresando al punto de partida.


Por lo denso de la manigua avanzamos lentamente; a veces, dos kilómetros por hora; otras, las más, tres kilómetros por hora. Nuestros baquianos indígenas marchaban adelante, silenciosos “mambiando” hojas de coca, con sus afilados machetes ayudados por largas horquetas que les permitían abrir paso en la manigua. Mientras tanto, nosotros los seguíamos confiados en sus habilidades naturales, expectantes por los misterios de la selva y sus tantos peligros anunciados: culebras, tigres, hormigas congas, zancudos anofeles, etc. Sin embargo cada rato les preguntábamos: “¿vamos bien?” y ellos, al unísono, en un maltrecho castellano, nos respondían “vamos bien”. Y continuábamos nuestra marcha.

Hacia el medio día, notamos -por el curso del sol, cuando el mar de enormes y altos árboles nos permitió verlo- que no íbamos con el rumbo debido. De nuestras alforjas sacamos una carta geográfica y una brújula, que corroboraron lo que tanto temíamos: estábamos perdidos en la selva. Entonces, con desazón magnificada por el cansancio, les dijimos:”baquianos brutos” e igualmente, como en las varias ocasiones anteriores, contestaron: “baquianos brutos”. Fue entonces cuando nos dimos cuenta que no hablaban nuestra lengua; simplemente repetían lo que nos escuchaban. Fallamos en la comunicación y en nuestra incondicional confianza depositada en los indígenas. Sobra decir que decidimos regresar a Getuchá para replantear el plan de ingreso y así poder cumplir con nuestra misión.

Pues bien, con motivo de la rendición de cuentas de la actual Administración Municipal, Empresa de Todos, se puso en boga, de moda, el ¡“VAMOS BIEN”!. Seguramente hay y habrá muchos “baquianos”, como los nuestros mencionados, que repiten y repetirán lo que oyen porque sí o por conveniencia; y otros, sin ser “baquianos”, porque de verdad están convencidos de ello.

Pero los de más allá creemos con objetividad y criterio bien fundamentados que, a pesar de los publicitados buenos propósitos de nuestro Burgomaestre, se hace imperioso tomar la brújula y reorientar algunos rumbos de su administración; y no permitir que nos perdamos en la “selva” de desaciertos, o en la maraña de inoperancia, provocados por sus baquianos Asesores  o Secretarios de Despacho. Cabe recordar aquello de que es propio de sabios reconocer y corregir sus propios errores. Y aún estamos a tiempo si se actúa con sabio eclecticismo. Por lo pronto, no nos dejaremos seducir por cantos de sirenas. Veamos sólo dos casos:

LA GLORIETA FRENTE AL BARRIO VILLA DEL CAMPO.
Es este un caso típico. Han pasado varias Administraciones Municipales sin que exijan al Gobierno Nacional (entiéndase INCO, ahora ANI) y a la Concesionaria Autopistas del Café S.A. la construcción de tan importante obra, que contribuirá a solucionar eficazmente los problemas del tránsito vehicular y de seguridad en el sector de influencia; obra que, al parecer, no está presupuestada y -por consiguiente- no ha sido contratada.

Y, preguntamos, ¿qué ha hecho la Empresa de Todos para que se convierta en tangible realidad tal intersección o glorieta? Que sepamos, ¡NADA! Y, también preguntamos, ¿qué ha hecho la Junta Directiva de la Empresa de Todos, que es el Concejo, para lograr una pronta solución a este problema? Otra vez: que sepamos, ¡NADA! Mientras tanto las muchas comunidades urbanas y rurales, siguen siendo presas inermes de la desidia administrativa.

Pero no sólo se debe tener en cuenta lo de esta glorieta. Faltan andenes o aceras en largos sectores de la Avenida del Ferrocarril; nada se avizora en relación con la “nacionalización” de tal Avenida, pues sigue siendo municipal pero con imposiciones inaceptables por parte del Gobierno Nacional. Y muchas obras más. Mientras tanto, TODOS como si nada sucediera o importara. ¡Ayúdanos Dios!

Este caso es exclusivamente de gestión ante la ANI o Ministerio de Transporte. Simplemente eso: gestionar.

PLAN DE ORDENAMIENTO TERRITORIAL.
El último POT aprobado integralmente por el Concejo, y que está vigente, es el de 2000, ajustado por el Acuerdo 014 de septiembre 4 de 2012, con el fin de incorporar algunos terrenos necesarios para programas de Vivienda de Interés Prioritario (VIP) y de Interés Social (VIS) y, sobre todo, para las 1.000 casas que el Ministerio de Vivienda en 2014 entregará gratis en nuestro Municipio.

Nuestra ciudad ha tenido un enorme auge urbanístico que, año tras año, ha desbordado el crecimiento normal de cualquier municipalidad, inclusive a Soacha, porcentualmente. Cuando este tipo de desarrollo se acelera, se requiere de una normatividad que lo regule de tal manera que se logre una interacción armónica entre los diferentes sectores poblacionales incluyendo la movilidad peatonal y automotor, el espacio público, el comercio y la industria. Esto es, estableciendo claramente los “polos de desarrollo”.

Por falta de un POT actualizado y debidamente estructurado, es por lo que la tierra urbana ha alcanzado precios de grandes urbes, que la hacen inaccesible para la mayoría de precaristas de techo propio y que permite el enriquecimiento de unos pocos urbanizadores privilegiados por la ausencia de normas reguladoras del uso del suelo.

¿Qué interés se esconde detrás de este desgreño urbanístico? Porque han pasado 12 años y del POT ¡NADA! ¿Hasta cuándo estaremos en este vacío normativo, culpa de la desidia de nuestros Administradores, incluido el Concejo?

*****

MUJERES de Dosquebradas y Risaralda: ¡FELIZ DÍA! Gracias por darnos la vida; por permitirnos conocer el amor; ustedes son manantial de ternura y felicidad; sólo a través de la Mujer podemos asegurar la supervivencia de la Humanidad. Gracias por su bondad y por su indispensable compañía. Gracias porque por ustedes tenemos una FAMILIA, célula fundamental de la sociedad. ¡Dios las bendiga!

No hay comentarios:

Publicar un comentario